Ayer no pude escribirte.
Estuve muy ocupado y se me hizo imposible.
¿Cómo estás?
Supongo que super ajetreada, preparándote para la noche buena.
Siempre tan emprendedora.
Estoy seguro que todo te va a quedar perfecto, como de costumbre.
Bueno, mi vida, me despido. Reitero que debes estar muy ocupada y no quiero quitarte mucho tiempo.
Te dejo un beso en la frente.
Valentín.